Servicio a la Comunidad Judicial.
Hoy es 1 de marzo,comenzó un nuevo año legislativo,
se ponen en marcha plenamente los poderes del Estado.
Vamos a tratar de dar una serie de pautas practicas para
la selección de colaboradores, que esperamos sean del
agrado de nuestros lectores.
Un buen colaborador no debe tener criterio independiente
ni iniciativa,estos atributos que son codiciados en la actividad
privada, son inútiles en la Administración Pública.
Siempre resulta mejor tener "Autómatas" que "Autónomos",
los autómatas comprenden con claridad los lineamientos
del pensamiento de los superiores, en cambio los autónomos
quizás se atrevan a contradecir a sus Jefes, con al agravante
que puedan generar ideas mejores.
Un buen colaborador debe ser cortes y hábil en el desempeño
social, interactuar con los grupos de poder, para lograr alianzas
y negociar influencias.
Debe además exterminar todo tipo de idea propia, para pensar
están los superiores.
Para la selección de postulantes, deberá tenerse muy en cuenta:
una bajísima idoneidad, un alto nivel de aceptación social del postulante,
indiferencia ante los conflictos que no lo involucren, obsecuencia y
sumisión.
Debe ser servil hacia la cadena de mandos superior e indiferente
y autoritario hacia abajo, deberá mantener el orden y a los subordinados
bajo su dominio ocupados en tareas inútiles, para disciplinar a los sediciosos.
No importa que el colaborador no cumpla los requisitos de salud
indispensables, seguramente tendrá una fuerte mejoría al ser
promovido.
El filtrar inquietudes de los subordinados e impedir que estas
pequeñeces perturben a los Jefes es una condición importante.
Una sonrisa amplia y generosa debe iluminar a los posibles
colaboradores, esta actitud desorientara a los inferiores menos
avezados y les hará pensar que en él encontraran un amigo,
así se evitaran conflictos gremiales.
El colaborador debe tener buena relación con los elementos
sindicales,y mostrarse timorato frente a ellos, para hacerles
creer que son poderosos y cogobiernan.
En el supuesto que la idoneidad de alguien sea tan baja que
no sirva para nada,se podrá valorar a ese postulante con
la capacidad alternativa para realizar espionaje y delaciones,
el perfil de traidor es muy adecuado y útil.
Desde ya la baja moral personal es una condición óptima,
y el origen espurio, que subordina naturalmente al colaborador
de por vida a su Mentor.
Bueno, estos son los requisitos básicos, todos aquellos que no
cuenten con ellos, no sueñen siquiera con llegar a algo mas.
se ponen en marcha plenamente los poderes del Estado.
Vamos a tratar de dar una serie de pautas practicas para
la selección de colaboradores, que esperamos sean del
agrado de nuestros lectores.
Un buen colaborador no debe tener criterio independiente
ni iniciativa,estos atributos que son codiciados en la actividad
privada, son inútiles en la Administración Pública.
Siempre resulta mejor tener "Autómatas" que "Autónomos",
los autómatas comprenden con claridad los lineamientos
del pensamiento de los superiores, en cambio los autónomos
quizás se atrevan a contradecir a sus Jefes, con al agravante
que puedan generar ideas mejores.
Un buen colaborador debe ser cortes y hábil en el desempeño
social, interactuar con los grupos de poder, para lograr alianzas
y negociar influencias.
Debe además exterminar todo tipo de idea propia, para pensar
están los superiores.
Para la selección de postulantes, deberá tenerse muy en cuenta:
una bajísima idoneidad, un alto nivel de aceptación social del postulante,
indiferencia ante los conflictos que no lo involucren, obsecuencia y
sumisión.
Debe ser servil hacia la cadena de mandos superior e indiferente
y autoritario hacia abajo, deberá mantener el orden y a los subordinados
bajo su dominio ocupados en tareas inútiles, para disciplinar a los sediciosos.
No importa que el colaborador no cumpla los requisitos de salud
indispensables, seguramente tendrá una fuerte mejoría al ser
promovido.
El filtrar inquietudes de los subordinados e impedir que estas
pequeñeces perturben a los Jefes es una condición importante.
Una sonrisa amplia y generosa debe iluminar a los posibles
colaboradores, esta actitud desorientara a los inferiores menos
avezados y les hará pensar que en él encontraran un amigo,
así se evitaran conflictos gremiales.
El colaborador debe tener buena relación con los elementos
sindicales,y mostrarse timorato frente a ellos, para hacerles
creer que son poderosos y cogobiernan.
En el supuesto que la idoneidad de alguien sea tan baja que
no sirva para nada,se podrá valorar a ese postulante con
la capacidad alternativa para realizar espionaje y delaciones,
el perfil de traidor es muy adecuado y útil.
Desde ya la baja moral personal es una condición óptima,
y el origen espurio, que subordina naturalmente al colaborador
de por vida a su Mentor.
Bueno, estos son los requisitos básicos, todos aquellos que no
cuenten con ellos, no sueñen siquiera con llegar a algo mas.
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